A día de hoy, es prácticamente imposible navegar a través de internet sin tener todos nuestros equipos debidamente protegidos ante la gran cantidad de amenazas que nos esperan en la red.
Las probabilidades de ser víctimas de un ataque de virus o malwares son infinitas, es por eso que para evitar este tipo de situaciones deberemos contar con un buen antivirus.
Instalar un buen antivirus para uso corporativo protegerá sus dispositivos y hardware, correos electrónicos, información de IP y datos sensibles de la empresa contra virus, malware, troyanos, ataques de phishing, ataques de spam y otras amenazas cibernéticas.
¿Qué es un antivirus?
La función principal de los antivirus es la de velar porque el software de los ordenadores, y su sistema operativo, este libre de cualquier intrusión, se ejecute correctamente y no sea el objetivo de virus informáticos, y si es necesario, se encargará también de desinfectar los archivo ya dañados para devolver el sistema a su estado natural.
Los antivirus tienen como objetivo analizar, reconocer, contrarrestar y desinfectar diferentes tipos de virus informáticos. Los más populares o comunes son Spyware, Gusanos, Troyanos o Rootkits.
Consecuencias de ignorar estas amenazas
Que los equipos de tu empresa se vena afectados por virus informático puede traer consecuencias gravísimas para tu negocio, la información privada de su corporación y la de sus clientes queda a merced de atacantes con intenciones maliciosas.
Las características más comunes si sufrimos un ataque informático de este tipo son:
- Perder datos muy importantes que no fueron guardados, previamente, en un backup. No solo perdemos datos sino, también dinero.
- Los equipos funcionan con dificultad o van muy lentos y eso hace que nos puedan utilizar.
- Uno de los más comunes, fraudes y robo de datos personales, que son utilizados para extorsionar a la persona que ha sufrido el ataque.
- Robo de identidad, donde sus equipos tendrán un papel protagonista, ya que podrían ser utilizados por hackers para llevar a cabo ataques a otros ordenadores.
Los peligros de operar sin antivirus
Cuando no dispones de un buen sistema de antivirus instalado en los ordenadores de tu empresa y estos están conectados a internet, los peligros que corren (mencionados en el punto anterior) son mucho mayores. Cabe mencionar que incluso si los equipos no están conectados a la red, es posible que también pueda colarse un malware a través de una memoria USB externa.
Gran parte de lo virus informáticos, que afectan a nuestros equipos podrían eliminarse o bloquearse a través de un buen software antivirus.
Ventajas de contratar un antivirus en tu empresa
Protección total contra troyanos, gusanos y malware
Esta es la principal razón por la que debemos contratar este servicio para nuestra empresa. Los malware, troyanos, gusanos… hacen que se sobrecarguen los recursos de tus equipo, permiten la entrada de intrusos en tu ordenador e, incluso, pueden llegar a provocar fallos en los servidores de tu empresa.
Cuidado de la privacidad
Los antivirus que ofrecemos en Micgrup están, también, diseñados para combatir el spyware o intrusiones que afecten a la privacidad de tus datos y los de tus clientes.
Como empresa, tienes la obligación moral y legal de proteger los datos de terceros que te han cedido toda esa información, como clientes y proveedores.
Análisis de e-mail
Analizar los archivos que recibes a través del e-mail es también muy importante ya que, hay documentos adjuntos aparentemente inofensivos que pueden haberse enviado con alguna intención maliciosa.
Evita problemas de adware
Hay virus que no buscan tus datos ni invadir tu privacidad pero pueden introducir publicidad en el navegador de tus equipos y que esta te aparezca en todas las páginas que visitas.
Garantiza el correcto rendimiento de tus equipos
Lo ideal es limpiar tu ordenador de virus de forma regular, mediante la instalación de un buen antivirus y el correcto mantenimiento del mismo.
Piensa que esto afecta directamente a la productividad de tu empresa y sus empleados, si tienes algún elemento intruso el rendimiento de tu ordenador puede hacer que tardes más tiempo en completar las tareas que tienes que realizar.